La celula animal – extracto de: https://psicologiaymente.com
LAS MEMBRANAS CELULARES Y SU IMPORTANCIA
Cada una de nuestras células está dotada de una membrana externa, la membrana plasmática, que influye enormemente en la actividad celular porque a través de ella se producen los intercambios entre la célula y el sistema sanguíneo, es decir, el paso de nutrientes hacia el interior y de sustancias de desecho hacia el exterior.
A su vez, en el interior de la célula existen otras numerosas membranas que delimitan orgánulos imprescindibles para la vida, como las mitocondrias encargadas de la producción de energía, o que por sí mismas llevan a cabo importantes funciones vitales como la síntesis de las proteínas necesarias para el crecimiento y el funcionamiento de nuestro cuerpo (Aparato de Golgi y Retículo Endoplásmico Arrugado), sin olvidar la membrana nuclear que encierra el material genético de la célula.
LA ACCIÓN DEL CAMPO MAGNÉTICO
Segun los resultados obtenidos por los cientificos, el campo magnético actúa tanto sobre los numerosos iones ubicados a nivel de las membranas celulares como en aquellos presentes en la matriz del interior de las células (líquido citoplasmático) en las que encontramos los importantes orgánulos y estructuras mencionados precedentemente.
Los iones, elementos químicos cargados eléctricamente, son esenciales no solo para el funcionamiento de las enzimas, proteínas envolucradas para el correcto desempeño de las funciones vitales, sino también porque su presencia es esencial para el flujo de nutrientes a través de las membranas y, conseguentementes, para la vida de las mismas celulas.
Las membranas celulares controlan, de hecho, el movimiento de los iones que las atraviesan para regular su concentración externa e internamente; este proceso genera un gradiente electroquímico que es utilizado por la misma célula para la absorción de nutrientes como, por ejemplo, los aminoácidos y los azúcares necesarios para su crecimiento y multiplicación (3).
La exposición al campo magnético determinaría una activación de los iones con la consecuente mejora de las condiciones fisiológicas de las células, aumentando la disponibilidad de nutrientes y la eficiencia de los procesos de expulsión de sustancias de desecho.
BENEFICIOS DE LA MAGNETOTERAPIA
En el caso específico de los procesos de regeneración asociados a eventos traumáticos que afectan al sistema óseo, la mayor movilidad iónica determinada por la exposición de las células al campo magnético aumenta la disponibilidad del ión calcio (Ca 2+) permitiendo una mayor velocidad de síntesis del callo óseo y una curación más rápida de la fractura (4).
Algunos estudiosos también indican que el aumento de la movilidad del ión Ca 2+ puede favorecer también la eliminación del exceso de calcio en las articulaciones que es el origen de enfermedades importantes como la artritis (5).
Otros estudios realizados en laboratorio han demostrado una acción favorable del campo electromagnético tanto hacia las células que componen y sintetizan el tejido cartilaginoso presente en las articulaciones, llamados condrocitos, con un aumento de su tasa de proliferación (1), como hacia las células predispuestas a la formación de tejido óseo, los osteoblastos, con un aumento también en este caso de su tasa de crecimiento y de la síntesis de colágeno y ostiocalcina, ambas sustancias esenciales para la salud de nuestros huesos (6).
Al mismo tiempo, la magnetoterapia, mejorando también la eficacia del sistema de expulsión de sustancias de desecho de las células, tiene un impacto directo y positivo sobre los fenómenos inflamatorios favoreciendo, por ejemplo, la reabsorción y curación de los edemas óseos o las inflamaciónes de tendones y ligamentos.
Estas observaciones confirman la utilidad de la magnetoterapia no solo en casos de fracturas o edemas que afecten al sistema óseo, sino también para el tratamiento de daños en los elementos cartilaginosos de nuestro organismo o para contrarrestar las consecuencias nocivas de algunas enfermedades crónicas importantes, como la osteoartritis y la osteoporosis.
Bibliografía:
1) L. Owen. Pain free with Magnet Therapy. Prima Health Publishing, 2000.
2) A. Sakai, K. Suzuki, T. Nakamura, T. Norimura et T. Tsuchiya. Effects of pulsing electromagnetic field on cultured cartilage cells. International Orthopedy n. 15 (4), 341-346, 1991.
3) W. H. Evans et J. M. Graham. Membrane structure and function. IRL Press – Oxford University press; In Focus Editor D. Rickwood, 1989.
4) G. S. Birla et C. Hemlin. Magnet Therapy – The gentle and effective way to balance body systems. Healing Arts Press, 1999.
5) L. Massari, F. Benazzo, B. Moretti, Fe. Falez, Fe. Donatelli. Impiego clinico della stimolazione elettrica in ortopedia e traumatologia. Giornale Italiano di Ortopedia e Traumatologia n. 43, 110-116, 2017.
6) C.H. Lohmann, Z. Schwartz, Y. Liu, H. Guerkov, D.D. Dean, B. Simon, B.D. Boyan. Pulsed electromagnetic field stimulation of MG 63 osteoblast-like cells affects defferentiation and local factor production. Journal of Orthopedic Research, n. 18 (4), 637-646, 2005.